Medidas de tiempo: Richard Misrach y Guillermo Galindo

  • Richard Misrach
    Artifact Grid, 2013 – 2015 (detail)
    Pigment print
    86 × 345 inches 
    Courtesy Fraenkel Gallery, San Francisco, Pace/MacGill Gallery, New York, 
    and Marc Selwyn Fine Art, Los Angeles
    © Richard Misrach

  • Guillermo Galindo
    Micro-orchestra, 2014
    Girl’s tweezers, food can, pink ball, child’s tennis shoe, toothbrush, pink comb, 
    pack of gum, pesos, tampon, round mirror, and scorpion with rattlesnake vertebrae
    Dimensions variable
    Courtesy of the artist

  • Guillermo Galindo
    Zapatello, 2014
    Found tire, found leather shoe, found nylon glove, 
    found Border Patrol targets, rawhide, bull horn, horn, and wood 
    70 × 30 × 76 inches
    Courtesy of the artist

    “Nos encontramos dibujando constantemente al mundo unido en términos de semejanzas y refundiciones”, señaló la escritora Rebecca Solnit. "Y el trabajo de los artistas es dibujar las líneas nuevamente para sobresaltarnos, despertarnos, ver la ruta secreta ahí o donde nosotros siempre hemos estado.”1 En su proyecto colaborativo, Border Cantos (Cantos de la Frontera), el fotógrafo Richard Misrach y el compositor vanguardista, Guillermo Galindo, reestructuran las principales discusiones y la cobertura que los medios de comunicación han dado a los problemas de la frontera entre México y Estados Unidos, dándole presencia a las miles de personas indocumentadas que cruzan a Estados Unidos cada año. 

    Su colaboración se desarrolló después de un encuentro casual durante un evento de la revista Pop-Up Magazine, organizado en la ciudad de San Francisco en noviembre de 2011. Misrach vio a Galindo tocando una composición original creada para instrumentos inventados que él había creado con objetos que encontró en la frontera. El concierto estuvo acompañado por una poesía de Daniel Alarcón. Misrach recuerda que tembló al es escuchar la interpretación de Galindo: vio y sintió la resonancia que existía entre su proyecto fotográfico de la frontera y la música de Galindo.2

    A principios de 2012, Misrach y Galindo desarrollaron procesos artísticos entre ellos y fusionaron sus elementos respectivos. Como Galindo ha comentado, “las fotografías de Richard [se convirtieron] en música y mi música se materializó en sus imágenes. En este punto, ninguna cosa podía existir sin la otra."3 En su proyecto compartido, los artistas ofrecen una respuesta provocativa a la división psicológica y mental de la frontera entre Estados Unidos y México—una frontera que históricamente ha sido disputada, que sigue generando discusiones sobre los límites políticos del Estado-nación, la seguridad de las fronteras nacionales y la libertad individual.


    Cada fotografía es una medida de tiempo.
    —Richard Misrach4


    Ya sea en las playas de Hawái, en las quemadas lomas de Oakland, California, o en Nueva Orleans después del huracán Katrina, Richard Misrach siempre ha estado interesado en lo que él llama “rastros del futuro”: objetos cuyo significado no está claro cuando los fotografía, pero que con el tiempo se descubre.5 “Todo se desarrolla en el paisaje”, explica Misrach. “Veo la fotografía completa en el tiempo y cómo los paisajes nos hablan”.6 A pesar de que sus fotografías del oeste de Estados Unidos evocan el trabajo de los eminentes fotógrafos paisajistas del siglo XIX, Timothy O’Sullivan (1840 – 1882) y Carleton Watkins (1829 – 1916), la práctica de Misrach se mantiene en la tradición de Ansel Adams y Edward Weston, cuyos paisajes del siglo XX hablan tanto de la belleza de lo natural, como de las políticas del uso de la tierra. Sin embargo, a diferencia de sus predecesores, Misrach trabaja con temas de color y escala, envolviendo a sus observadores en un grandioso lenguaje visual para transmitir las tragedias de nuestro tiempo. En soledad, Misrach deambula por el paisaje buscando cosas que están ocultas a plena vista: la profanación de la tierra pública en Carson Sink, Nevada, que va desde las pruebas nucleares ilegales; las reliquias del desastre ambiental de 1970 causado por una década de inundaciones en el mar de Salton, California, y los efectos ecológicos del desperdicio tóxico vertidos en el corredor industrial del Río Mississippi entre Baton Rouge, Luisiana, y Nueva Orleans. Desde 1979, Misrach ha fotografiado los cambios devastadores en el desierto americano que han sido resultado del desarrollo humano y de la degradación ecológica. Colectivamente, esas imágenes integran The Desert Cantos (Los Cantos del Desierto), que es el proyecto fotográfico más largo y ambicioso del artista. Su trabajo en la frontera de Estados Unidos y México es un subconjunto de esta iniciativa que continúa.

    Misrach comenzó a fotografiar la frontera de 1,969 millas entre Estados Unidos y México en 2004 y, más ampliamente, desde 2009 cuando notó el incremento de la vigilancia y la prácticas policiacas de estilo militar, impulsadas en gran parte por el refortalecimiento y expansión del muro fronterizo. Ve a la región y a su multimillonaria barrera de acero corrugado como un lugar donde las políticas y las culturas chocan de manera fraccionada y a menudo en formas trágicas. Misrach ha fotografiado toda la frontera y ha capturado los diversos estilos de valla, tal y como corta el desierto vacío, los pastizales y las montañas escarpadas. Desde que comenzó a colaborar con Galindo, ha enfocado su revelador lente hacia las diversas comunidades, mutuamente dependientes de la zona fronteriza, y se ha centrado en los objetos encontrados que revelan las huellas de los viajes humanos a través del desértico paisaje. 

    A principios de 2014, Misrach visitaba la frontera de Brownsville, Texas, cuando notó una "huella del futuro": pertenencias de niños ensuciando el árido paisaje. Desconcertado, fotografió y recogió estos objetos sólo para darse cuenta varios meses después de lo que implicaba su hallazgo. Ese verano, las noticias se desbordaron con respecto al aumento de los menores no acompañados que han emigrado a Estados Unidos desde 2013. Durante este periodo, la agencia US Customs and Border Protection ha aprehendido 52,193 niños, representado un aumento del 99% con respecto al año anterior.7 Repentinamente, las imágenes relativamente sencillas de Misrach de los zapatos de un niño con agujetas de velcro azules, las pinzas de una niña y una mochila que contenía un pequeño labial, que se encontraban dispersos por el desierto, se convirtieron en retratos inquietantes y sombríos de jóvenes vidas humanas vulnerables.


    [Mi] música es una historia imaginaria que cada objeto 
    tiene y carga dentro de él.

    — Guillermo Galindo8


    Guillermo Galindo, de origen mexicano, combina las tradiciones vanguardistas musicales de John Cage, Morton Feldman y Karlheinz Stockhausen con una profunda sensibilidad de los eventos culturales y políticos contemporáneos, particularmente aquellos relativo a la frontera entre Estados Unidos y México. Empezó a recoger objetos encontrados en Laredo, Texas, donde se encontró una mochila de un niño con el dibujo de la caricatura favorita de su hijo. "Eso me impactó mucho. Que un niño de la edad de mi hijo estuviera ahí, pasando por todo esto con su mochila.”9 Galindo considera que los instrumentos que construye con cosas abandonadas son sagrados porque encarnan la esencia espiritual y anímica de sus antiguos propietarios, recordando las tradiciones musicales que muchas culturas indígenas de todo el mundo han practicado. "En el mundo precolombino, hay una íntima conexión entre el instrumento y el mundo material del que está hecho", señaló Galindo. "Todos [mis] instrumentos se inspiran en esa idea."10
     
    Galindo y Misrach se conocieron de manera fortuita en 2011: debido a los cambios en el ambiente político en la frontera entre México y Estados Unidos, Galindo había dejado de hacer viajes regulares a la región para recolectar objetos y crear sus esculturas musicales. "Ya que soy mexicano, tengo más problemas que Richard cuando voy a la frontera," señaló Galindo.11 Misrach lo explica: "Como yo soy blanco con ojos azules, puedo estar allí [en la frontera] y trabajar. Si Guillermo va, puede ser bastante desagradable.”12 Ambos se reconocen a sí mismos en el otro a través de sus diferencias, sin embargo, sus similitudes vinculan y unen a estos dos artistas y a sus obras. "He empezado a pensar en la cámara como un metrónomo," señaló Misrach.13
     
    Ya que siempre está interesado en la tensión entre los aspectos sublimes de la naturaleza y la intervención humana en el paisaje, las fotografías de Misrach no son fáciles de ver, básicamente crea un "objeto encontrado que está cargado de significado."14 En las zonas fronterizas, fotografió objetos desechados y luego los envió de regreso con Galindo a Oakland, California. El compositor transformó esos objetos rescatados en instrumentos que están inspirados en una amplia gama de tradiciones musicales indígenas y no-occidentales que viene de todo el mundo: una lata de comida vacía se convirtió en la cámara de resonancia de un instrumento que está inspirado en un erhu chino con una sola cuerda; los cartuchos vacíos de una escopeta unidos, crearon una variación del shekere de África Occidental, un guaje generalmente cubierto con una red de collares o conchas marinas.
     
    En conjunto, las fotografías y los instrumentos proponen formas distintas, pero íntimamente relacionadas para dar testimonio de las consecuencias humanas que se derivan de la vigilancia de la frontera, de la construcción de un muro y de políticas migratorias muy debatidas. Las composiciones e instrumentos musicales de Galindo, literal y metafóricamente, amplifican y encarnan las fotografías inquietantes de Misrach con paisajes hostiles y objetos abandonados.
     
    Cuando regresó de la frontera a principios de 2014, Misrach le dio a Galindo algunos objetos que encontró de unos niños. El compositor re-imaginó estos objetos abandonados para crear una "micro-orquesta," dibujando sus sonidos potenciales mediante el movimiento, golpeteo, raspando, frotando y arrugando cada uno de ellos contra la madera, el metal y las superficies del cuerpo. Se concentró en los sonidos “que habitualmente no oímos y que comúnmente no entendemos como música"15, amplificándolos con micrófonos sensibles al contacto. Los efectos delicados, misteriosos y acumulativos encarnan el angustioso viaje que estos niños enfrentaron al cruzar la frontera hacia Estados Unidos.


    *****


    Las fronteras cambian, se expanden, contraen, crecen y caen todo el tiempo. Existen en todas partes. Desde lo microscópico hasta lo monumental y de lo físico a lo psicológico. Llevamos las fronteras con nosotros a dondequiera que vamos. A veces, se mantienen ocultas. Otras veces, se revelan en la forma en que miramos, los lugares a los que viajamos, los idiomas que hablamos y la comida que comemos. Las fronteras contienen, en lugar de proteger; causan discordia, en vez de unidad. Como lo observa Solnit, la frontera entre Estados Unidos y México representa "una línea en la que la memoria puede permanecer sin viajar, la empatía puede ser confiscada, la verdad puede ser retenida indefinidamente, significando estar perdidos en la traducción."16 Misrach y Galindo honran la memoria de los migrantes y las vidas que se perdieron en la frontera del desierto. Nos muestran las afinidades que nos unen para despertar la empatía y la reflexión. Revelan las realidades de la frontera y las comunidades y los entornos que afecta. En Border Cantos, el significado se desarrolla con el tiempo cuando las imágenes, objetos y el sonido se unen en una armonía sinfónica.


    Rory Padeken
    assistant curator






    Notas

    1. Rebecca Solnit, “Drawing Constellations,” in Storming the Gates of Paradise: Landscapes for Politics (Berkeley: University of California Press, 2007), 166.
    2. Richard Misrach quoted in “Border Signs,” The California Sunday Magazine, November 2, 2014, 36.
    3. Guillermo Galindo quoted in “Border Signs,” 36.
    4. Richard Misrach quoted in John Guida and Sara Barrett, “Click Here for the Beach,” The New York Times, May 5, 2015, http://takingnote.blogs.nytimes.com/2015/05/05/click-here-for-the-beach….
    5. Misrach in “Border Signs,” 26.
    6. Richard Misrach quoted in Eleanor Morgan, “Shoes, Books, Bullets and Backpacks – Every Found Object On the Mexican Border Represents a Tragedy,” Vice, December 9, 2014, http://www.vice.com/read/found-objects-along-the-mexican-border-become-….
    7. Hannah Rappleye, “Undocumented and Unaccompanied: Facts, Figures on Children at the Border,” NBC News, July 9, 2014, http://www.nbcnews.com/storyline/immigration-border-crisis/un documented-unaccompanied-facts-figures-children-border-n152221.
    8. Guillermo Galindo quoted in Gabe Meline, “Along the U.S.-Mexico Border, an Unlikely Music is Born,” KQED Arts, February 4, 2016, http://ww2.kqed.org/arts/2016/02/04/guillermo-galindo-bor der-cantos-instruments-interview/.
    9. Galindo in Morgan.
    10. Galindo in “Border Signs,” 36.
    11. Galindo in Meline.
    12. Misrach in Morgan.
    13. Misrach in Guida and Barrett.
    14. Misrach in “Border Signs,” 26.
    15. Galindo in “Border Signs,” 36.
    16. Rebecca Solnit, “Thirty-Nine Steps Across the Border and Back,” in Storming the Gates of Paradise: Landscapes for Politics, 79.